martes, 7 de agosto de 2007

Lo impecable multiregistro ¡¡y yo plagada de nidos!!

¡¡Qué difícil es lograrlo!! ¡¡Dificilísimo!! Muy complicado, pero muy muy muy. Por eso admiro tanto a Rosana Schoijett. Durante mucho tiempo miraba sus fotos y no me pasaba nada. De nada. Y de repente ¡¡clack!! la cabeza me hizo un giro de 360 grados. Me voló la cabeza. En cinco millones de pedazos. Así es la obra de Rosana: cuando te pega, es bestial. Pasé de la indiferencia a adorarla. Porque la adoro.
Hay veces que vemos bien la obra de un artista.¿¿Qué quiere decir ver bien?? Fácil: ves justo la obra que tenés que ver y entendiste todo. Pero otras veces es al revés. Las primeras fotos que vi fueron las que Rosana presentó en el Malba, con la curaduría de Alberto Goldenstein (un maestro). Me parecieron divertidas: hasta ahí. No mucho más. Me sacaron una sonrisa.
Después vi otras fotografías. Todo bien. Pero no me pasaba nada. Que había calidad, sin dudas la había. Pero podía prescindir de sus imágenes.
La instalación fotográfica que hizo en ArteBA me gustó mucho. Me inquietó. Me empezó a ganar. El bichito de la curiosidad comenzó a plagarme de nidos. Y después me encontré con esta serie. Fui descubriendo aquí y allá sus viejas series. Y cada vez me rompía más la cabeza. Me costó entender a Rosana, pero valió la pena todo ese esfuerzo. Revalió la pena.
Una amiga tiene en un cd las fotos que presentó en la Beca Kuitca (me pidió que no lo diga ¡¡perdón!!) pero me emocionaron tanto que me hicieron llorar.
Rosana tiene una sensibilidad increíble.
Increíble.

Hace unos días volví a ver las fotos que ilustran el libro de Kacero. Las miré con el detenimiento que no le había dedicado la primera vez.
Rosana es una genia.
Pero muy genia.

Dueña de una obra por la que tiene que ser considerada, hoy por hoy, maestra.
Porque es lo que todos queremos.
Todos.
Que haya muchos artistas que aprendan de ella.
Si esto sucede, nuestro arte, que ya es muy bueno, sería todavía mejor.
I love you, Ros!!
1.000.000 Kisses!!