viernes, 26 de febrero de 2010

Chicas de todos los tiempos


¿¿Por qué nadie lo dice?? ARTISTA es en femenino. No es ARTISTO. No se dice así. Se dice ARTISTA. ¿¿No será porque la sensibilidad de las chicas es superior?? ¿¿O porque los artistas hombres deben conectarse con su parte femenina para hacer obras que nos conmuevan?? Ser mujer es genial y no es nada fácil, porque vivimos en un mundo de hombres, lo que por un lado está bueno (¡¡son tan lindos!!) y por otro es horroroso.
Empiecen a aceptar, chicos, que somos más sensibles que ustedes.


Esta obra de Adri Minolitti es lo más. Adri es lo más. Porque escapa a las cronologías. Es una obra clásica y a la vez contemporánea. Si las canciones que más nos gustan tienen un dejo sesenta u ochenta sin dejar de ser contemporáneas ¿¿por qué no iba a pasar lo mismo con la pintura??
Además, es vanguardismo de chicas.


La historia del arte la escribieron los hombres. ¿¿Por qué no conocemos del pasado tantas artistas como deberíamos?? A una mujer le re costaba llegar a hacer sus obras y mostrarlas. Hasta bien entrado el siglo XX no existían ni ahí las mismas condiciones para hacer arte entre hombres y mujeres. Por eso veo las obras de Flavia Da Rin como una reivindicación. Ella puede habitar todas las épocas porque ahora podemos hacerlo. Es una reparación histórica.
¿¿Las historiadoras del arte no son un poco machistas??
¡¡Escriban más sobre las artistas del pasado!!
Es metira que empezó todo con Frida Kalhó.


Las obras de Flavia, como las de Adriana, tienen mucho de atemporal ¡¡y son re de ahora!! Está buenísimo poder viajar por las sensibilidades que tanto tiempo fueron relegadas. Ahora están todas acá y son re presente.


Lula Mari es de mis favoritas. Aunque se resienta un poco a ser mi amiga yo la quiero un montón. Lo que estuvo pintando estos últimos años es hermoso. Me encanta que todas estas artistas tan diferentes sean artistas de todos los tiempos, porque podemos conectarnos con miles de sensaciones que otros quieres relegar. El presente lo actualiza todo. Vivimos en la época que se nos antoja.


Maestra total, Diana Aisenberg nunca le tuvo miedo ni al presente ni al pasado. Sus Madonnas son de hoy y de todos los tiempos. El arte es un sentimiento religioso. Nos conecta con algo maravilloso. Con las sensibilidades de miles de mujeres de todas las épocas que ahora tienen todas las oportunidades para reescribir lo mentiroso de la historia.


Más presente que el presente, las divinas Conchetinas. Ellas hacen lo mismo pero con el futuro. Vienen de un tiempo que todavía no existe. Sólo en su imaginación.
Somos chicas de todos los tiempos.
¿¿Para qué preguntarnos la edad si tenemos todas las edades??