sábado, 26 de julio de 2008

ByF nos cambió la vida y estuvo rebueno

¿¿Qué hubiera sido de nuestro arte sin Belleza y Felicidad?? Cuanto más pasan los meses no sólo que extrañamos más, sino que tenemos como una especie de perspectiva para analizar qué significó para cada uno de nosotros.
Si bien los balances históricos son importantes, me reinteresan los balances personales. Lo que significó para cada uno de nosotros ByF.


Porque todos tenemos una opinión. También están los que todavía no se dieron cuenta de lo importante que fue. Perdón. De lo importante que es, porque Belleza y Felicidad aún sigue.
Estaba hace un rato dando vuelta por los blogs que me gustan y llegué al de Belleza. Y me encantó ver que seguía. Que había materiales nuevos. Me reconmueve esa idea tan tradicional y potente de que es imposible separar vida y arte. Que en el mismo blog podamos ver fotos de la playa, de quienes integraban el staff de ByF pasándola bien.







Muchos de los que apoyaban a la experiencia en sus primeros meses se fueron alejando. También pasó al revés. Con el tiempo, algo que ya sabemos se volverá indiscutible y es que ByF es un hito histórico.
Pero no tenemos que dejar que ese discurso lo ocupen solamente los historiadores. Yo estoy escribiendo mi texto sobre Belleza y estaría rebueno que vos también lo hagas. Que pensemos qué significó para cada uno. Porque fue un espacio, una estética, una forma de ver y hacer arte, un montón de momentos maravillosos, pero más que nada una forma de sentir. Muchas formas de sentir el arte. Y de eso los historiadores no hablan. Porque no pueden o no sé por qué. Así que está bueno que nosotros tomemos ese lugar, y anotemos. Deberíamos hacer el libro colectivo de ByF como experiencia colectiva.




Muchos de nosotros nos interesamos en el arte de muchos genios jóvenes a partir de ByF. Conocimos su obra. Los vimos. A partir de ByF empezamos a investigar y encontramos otros lugares, más artistas. Y los conocimos y los seguimos e intercambiamos instantes inolvidables.
ByF sigue en nuestros corazones, en nuestras cabezas. En el aire. Nadie se olvida. En cada muestra de Fernanda vuelve a estar de otra forma ByF. En cada actividad. En cada sueño.



Hacemos algo con el ByF que cada uno de nosotros tiene. Es una energía, una manera de hacer las cosas. Un amor.
Muchos. Todos.